Este miércoles fue la última jornada de trabajo de Rogelio Hube, el único empleado de la estafeta del Correo Argentino de Gualjaina que cerró sus puertas como tantas otras a lo largo y ancho del país.
Vecinos del lugar se acercaron al edificio para acompañar a Rogelio y brindarle su afecto en el último día de trabajo, tras 25 años de servicio. Entre lágrimas y aplausos de reconocimiento, entregó las llaves y se retiró con su bicicleta.
Los presentes capturaron el momento cargado de emociones, se sacaron la última foto con el único encargado del Correo, que cerró sus puertas de manera definitiva, y le entregaron una placa de homenaje a su labor.
Este miércoles vencía el plazo que le dieron para acceder a su retiro voluntario, aunque si no lo aceptaba igualmente quedaría sin su empleo tras la decisión del gobierno nacional de cerrar la oficina.
Fuente: EQS.